domingo, 19 de agosto de 2012


Pluriformas  y meta-campos cyber


Texto comentado en cursiva.

Las pluriformas tanto del cuerpo como del espíritu cyborg permanecen en constante cambio; en primer lugar, a razón de un cuerpo que precisa de actualizaciones de visión y revisión ocular e informática de los campos de información encargados de su evaluación.  

Hardware -> cuerpo / Actualizaciones -> software
Revisión y visión ocular e informática = Juego de palabras. Significa la actualización y revisión constante de los tecno-campos (circuitos, superficies electrizantes…) de información cibernética.

Los tecno-campos dejaron de ser superficies hardware con el advenimiento de la post-modernidad. Los meta-campos son la evolución exponencial del hardware monotópico (un solo lugar) en la objetivización de las redes de conocimiento on-line sin superficie sólida permanente. (Internet es un meta-campo, el ordenador en sí es un tecno-campo, pero uno y otro son indisolubles, y la unión entre ambos constituyen la Matriz Total).

Sus meta campos residen en la aspereza modernista de la ciudad y en las brechas de la Matriz Binaria.

Imaginemos una metáfora pictórica. Suburbios futuristas de una ciudad colapsada por el espectro postmodernista. Los territorios del sujeto nómada en una ciudad postmoderna, teniendo como enlace inicial el cuerpo dispuesto con una conexión hardware con la Matriz On-line deviene en su característica nomadista por la implicación de sus conexiones adyacentes y de apertura en cualquier campo de experimentación tecgnóstico en la ciudad. Sus meta-campos son justamente los espacios de inserción hardware no definidos por la corriente fija y unificante de los espectros “ciudadanos” opuestos al conocimiento expansivo on-line. Estos últimos no tienen una conexión de meta-campo real pues realizan sus conexiones en lugares fijos y perpetuos. La ciudad deviene en sí misma un meta-campo frente a la dualidad de aquellos topos que fijan su atención en reducciones físicas de conexión (off-line).

La dualidad embarazante y embarazosa de las texturas que a modo de sharpenings van definiendo el campo de acción y movimiento espacial transmiten un tipo de conocimiento enlazable con la situación y el aspecto que se aparece ante el ojo y el sensor atento.

El conocimiento expansivo de los “sujetos dispuestos” (dispositivos) aportan sobre las texturas sharpeizantes un conocimiento como espectro devenido del post-humanismo y de la tecnofilia radicalmente avanzada. Los espectros derivados como prismas transparentes y reflejantes de una realidad foto-pulsante aporta(n) no más de la mitad del total del conocimiento que por devención dualizante vida-muerte-blanco-negro rinde cuenta de la pseudo-mitad dual expansiva y procognoscitiva de este mismo conocimiento que en un principio fue unicognoscitivo sobre hardware orgánico y posteriormente metálico (inorgánico) de los primeros dispositivos de conocimiento electrónico del siglo XX.

El meta-campo no es percibido por el sensible sensor biosólido (hardware orgánico), sino por la sensibilidad del sensor mecánico. El sujeto de la ciudad postmodernista se mueve entre sus propios campos de sensación y virtualización de afectos y mecafectos (afectos derivados de la conexión(-es)) mecánicas sobre un soporte con la Matriz y el cuerpo. No obstante los mecafectos derivados de una conexión mecánica no son en modo alguno de “calidad” inferior de unos mecafectos derivados de una conexión a la Matriz. La clasificación en sí misma entre afectos y mecafectos – como dos espectros distintos de conocimiento “efectivo” – no es condición de una mejor expansión del Conocimiento.

Los más allá campos de la presencia mecánica son la libertad del corpóreo matrizinio tecnicista (=Tecno-campos). La permutación transfinita de campos sobre cibercuerpos y ciberformas define el meta-campo de conocimiento y sensibilización en las plataformas de fantástica mecasomatología, es decir, un cuerpo Mecánico no siempre es ordenado, es por eso que es fantástico.

“La fantasía consiste en trascender la realidad sin necesidad de concepto o conceptualización alguna”.

“La caracterización del conocimiento expansivo es justamente su carácter fantástico, que trasciende los cánones de tiempo, espacio y concepto. La realidad está definida por tres espectros: tiempo, espacio y concepto. El carácter fantástico de la realidad reside en la transgresión de estos tres espectros; es así como se crea la fantasía literaria y Humana.”

“El conocimiento deviene fantasía sin hardware y sin canon, es por eso que los meta-campos son fantásticos, pues fantasean la realidad, ¿Y qué mayor fundamento de la realidad que el conocimiento que la sostiene y define?!”.

sábado, 18 de agosto de 2012

Hybrid Schemata (Phylum Borgir)

Únicamente quería resaltar la importancia de los esquemas (lat. schemata) en el ámbito gnóstico, antes que epistemológico o científico, con graves diferencias respecto a la Mathesis de la que ya Hebe y yo habláramos y comentáramos*. Por supuesto, no voy aquí a exponer ampliamente mis consideraciones en torno a la noción de Schema, pero me parecería sugerente hablar de éstos como Dispositivos rizomórficos, mucho antes que meros aglomerados raciomórficos.

Sea como sea, la palabra esquema procede del griego skhema (forma, figura) cuya raíz indoeuropea segh viene a significar 'sostener'. Nova Klam (Noko para los colegas) escribe en 'Plexo' que su concepto (plexo) significa primeramente "esquema que divide y unifica" (p.5). El plexo muestra "los puntos de un esquema por separado", unifica en cuanto muestra "los mismos puntos" que formarían "un conjunto o varios conjuntos". En realidad, creo que el plexo de por sí está conformado por dos esquemas que funcionarian como polos o 'límites' y, siguiendo a Noko, podríamos decir que éstos no cierran el Schema (que sería la conformación o segmento-plexo) sino que lo disponen siempre hacia otros esquemas. Lo que parece que Klam hace es justamente optar por una doble operación que no aísle al esquema del mundo (welt) que define y que a la vez sea capaz de sostenerse o de poseer consistencia no en virtud de su unidad, sino justamente en las relaciones existentes entre esos puntos. Considero que tampoco está haciendo de los esquemas una noción meramente intelectualista del conocimiento, y prueba de ello es que su libro no cesa de remitir a plexos mentales, sentimentales, sociales, etc. Teniendo en cuenta que Deleuze y Guattari ya hablaran de cartografías, como mapas que orienten al pensamiento, en cierta manera Klam lo que hace - si no me equivoco - es justamente un poblamiento de esas cartografías o, mejor, acelerar esas cartografías para obtener una variación que de alguna forma se mantenga y otorgue consistencia a la cartografía como tal. Porque antes de que conocer un espacio, hay que saber ese espacio (creo que esta distinción es clave para dejar de otorgar una autoproclamada supremacía estúpida de la filosofitis cientificista, que no científica y cuyos máximos exponentes son, a mi parecer, Bachelard, Feyerabend y, en última instancia Bataille y Nietzsche).

 Estamos llenos de esquemas que producimos y nos producen: "Los plexos que conforman el mundo tienen la significación que antes hemos mencionado; En un cuerpo cualquiera se realiza una esquematización mostrando los puntos claves del modelo de sensación y percepción"(págs.6 y 7)
Recapitulo: El Esquema como cartografía del Saber y los esquemas como aprendizajes consistentes (o consistenciados - al decir de Guattari en Cartografías Esquizoanalíticas) que de ninguna manera están cerrados sobre sí mismos, puesto que "las líneas que serpentean al conjunto se quedan pendidas a la espera de realizar uniones entre conjuntos y segmentos de conjuntos con sus líneas de enlaces particulares" (p.30). Sí, pero tan 'particular' (o si se quiere, molecular) es el enlace de los esquemas como el o los enlaces entre esquemas (Esquema). Y además, los enlaces no son unidireccionales sino que también existen "escapadas y huidas de segmentos adyacentes: olas fugaces y carbonizantes que escapan del centro solar para perderse en el espacio" (p.30). Nos surgiría la pregunta sobre si Noko está intentando hacer un tipo de filosofía del conocimiento total. Me parece que sería una imbecilidad suponer semejante cosa, a no ser que por total consideremos no la suma de las partes, sino lo total como una incesante multiplicación y división, alzas y caídas de intensidades o fuerzas. De hecho, debo repetir que ha de tratarse el libro de Noko más que como un tractatus como un himno al hiatus, porque de ahí y de sus límites de donde vamos comprendiendo y conformando (al mismo tiempo que somos conformados) diferentes modos de esquemas expresivos y expresividades esquemáticas. Por ende, no se trata de una iniciación en el conocimiento, sino de una involución como diría Deleuze 'creativa' de una baja gnosis (al decir de Bataille) donde el pensamiento-cuerpo se desprende de la representación y de los órganos de la misma hasta que se dibuja como relámpagos en mitad de la noche, con sus trayectorias y líneas angulosas acompañadas de una luz que ya no posee centro alguno y cuyo comienzo sólo es tal para dejar de comenzar y rebasar el Origen. Así sea el Esquema, que no tiene nada que ver con la expresión del Órgano, sino más bien y como he dicho más arriba, de una Disposición rizomórfica (el rayo es el rizoma) que ya no es definido ni por sus órganos ni por sus cuerpos, sino más bien por sus zonas de vecindad continuas y discontinuas, por sus membranas frecuentemente perforadas desde 'dentro' y desde 'fuera'.

Dejo un párrafo aquí que me ha parecido soberbio (cf. Plexo, p.31):

Las líneas de apertura, las de escape se lanzan y transmiten direcciones informativas, pedazos de consciencia. Tal vez su velocidad sea demasiado fuerte o demasiado débil, pero de su intensidad se desprende la actualización del conjunto. Si las líneas son demasiado veloces pueden rebotar perdiendo su intensidad, o si van demasiado despacio puede que pasen de largo [Nótese la inversión de las imágenes]. Pero aun cuando se llegue a realizar la conexión o no, el conjunto no reniega de la creación de nuevas líneas dispersándolas a través del espacio mediante un proceso de continuo movimiento, tal vez crecimiento, actualizando al sistema completo y re-direccionando sobre fluctuaciones y estados de conexión. Su estaticidad particular es temporal, ya que los enlaces se realizan mediante velocidades distintas. Velocidades de unión y des-unión, velocidades de espera y serpenteo. En el espectro de la aceleración [...] (se) conforman permutaciones de enlaces multidireccionales con direcciones y escapes en ocasiones más o menos unificados" (vale decir consistenciados. Nota mía).

En fin, por esta noche va bien. Me voy a leer un rato De profundis y ya me contaréis.

Atte.,

Brx.


* Para más info, léase el artículo de Deleuze sobre el libro en torno a la Mathesis de Malfatti de Montereggio. Y en efecto, no he terminado de confrontarlo con la mathesis, es lo que pasa con los esbozos y la escritura directa en blogger